Antonio de la Fuente Arjona propone en esta obra teatral para jóvenes una divertida propuesta que podrá llevar a nuestros alumnos a acompañar a los personajes de la historia, a jugar con las matemáticas y a resolver diversos enigmas que a lo largo de las páginas se van planteando.

Una buena manera de lograr que los más pequeños se interesen de modo ameno por diversos aspectos de la vida cotidiana que tienen directa relación con esta materia a veces considerada árida por los jóvenes.