De Tracy Chevalier había leído hace años La joven de la perla, libro del que conservo un agradable recuerdo.

La novela que reseñaré brevemente, editada en Lumen, tiene como fondo el tema de la no aceptación de las diferencias raciales, los celos obsesivos que conducen a consecuencias imprevisibles y las relaciones interpersonales de unos jóvenes en plena adolescencia.

La ambientación, en un colegio, el breve tiempo en que se desarrolla la historia (un día) y la caracterización perfectamente lograda de varios personajes centrales son aspectos importantes para entender la intensidad y concentración que se logra en esta corta novela. En este sentido, me ha encantado que, en pocas páginas, en un  espacio temporal y espacial reducidos se consiga plantear una situación conflictiva por el comportamiento de unos adolescentes ante la llegada de un joven negro a un colegio de Washington en el que todos son blancos. 

El argumento y desarrollo de la historia mantienen nuestra atención hasta el final.